Comprar de segunda mano no es tan mala idea

Una mujer de Canadá asistió a un rastrillo vecinal y compró un sillón por unos 25 dólares, poco más de 20 euros. En esos momentos, no sabía que estaba adquiriendo una fortuna.

Cuando llegó a su casa con su sem-nuevo sofá, y se dispuso a explorarlo, se encontró un reloj Rolex, la marca de relojes más cara, perdido dentro de uno de sus cojines. Al principio contactó con su padre pensando que sería suyo, pero este le respondió sorprendido: "Por supuesto que no es mío, sabes que no tengo ningún Rolex".

La familia acudió a una joyería cercana a su domicilio donde les notificaron de que se trataba de reloj de coleccionista considerado como el más caro del mundo ya que en una subasta en 2017 fue vendido por 17 millones de dólares.

Rolex autentificó del reloj, no obstante, rebajó la cantidad a 250.000 dólares.

Solo existen 3.000 relojes de semejantes características.